Para los que gusten de cortos paseos y sin mucho desnivel, la visita a las ruinas de las Minas de la Divina Providencia desde Pontedo (Cármenes) es una buena opción. Menos de 9 kilómetros y unas tres horas, sin prisas.
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| Ruinas de la Mina de la Divina Providencia |
En coche desde nuestra casa rural en Camplongo, hasta Pontedo tenemos 16,5 kilómetros y nos llevará algo menos de 20 minutos, pasando antes por Villamanín y por Cármenes.
Aparcamos al lado de la bonita iglesia o ermita de San Pelayo,
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| Ermita de San Pelayo (Pontedo) |
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| Atrio de la iglesia de San Pelayo |
Y comenzamos a caminar por la carretera que va en dirección a Cármenes, por donde hemos venido en coche, atravesando un puente para salvar el Río Torío.
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| Río Torío |
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| Sendero que va a Villanueva de Pontedo |
Y tras llegar a Villanueva de Pontedo, en el centro del pueblo tomamos un camino que en suave pendiente sale hacia la izquierda, para continuar hacia las Minas de la Providencia. Pasado el pueblo encontramos una fuente si necesitamos beber.
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| Dejando atrás Villanueva de Pontedo |
Tras un tramo de subida la pendiente se suaviza y llegaremos a un nuevo cruce donde debemos continuar hacia la izquierda siguiendo el curso del Arroyo de la Mina. Aquí ya veremos restos un par de edificios ruinosos que en su día seguramente formaban parte de la explotación minera.
Y no muy lejos de este cruce, con el riachuelo a nuestro lado, encontramos ya el grueso de las edificaciones en ruinas que formaban parte de la explotación minera (presa de lavado de mineral, hornos, plantas de procesamiento), así como alguna bocamina y unas cuantas escombrera.
Y del otro lado del arroyo tenemos también un pequeño pero bonito hayedo.
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| Escombreras |
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| Escombreras y edificaciones con el hayedo a la derecha |
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| El hayedo del otro lado de las edificaciones |
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| Presa |
En las Minas de la Providencia se extraía cobre, hierro y níquel hasta los años 60 del siglo pasado aunque según los estudiosos parece ser que ya desde el Neolítico y en la época romana se obtenía mineral de cobre de esta explotación (al igual de la Mina la Profunda).
En esta mina se descubrió en 1920 un mineral hasta entonces desconocido y que los químicos y geólogos Schoeler y Powell bautizaron como Villamanitina en honor al lugar donde se hospedaban (Villamanín).
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| Villamanitina |
Para el regreso hasta Pontedo lo hacemos por el camino de ida hasta llegar al punto de partida en el aparcamiento de la Ermita de San Pelayo.
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| LLegando a Pontedo y a la Ermita de San Pelayo |
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| Mapa de la ruta |
Enlace al track de la ruta en Wikiloc:
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